Los métodos de registración evolucionan con el mismo ritmo
que la Contabilidad, ya que son un medio de expresión de la misma.
Los procedimientos con que se hicieron las primitivas registraciones
no
tenían una
denominación especial,
posteriormente
se les llamó “partida
simple”.
En su origen se usó para tener conocimiento del aspecto jurídico de la empresa, solo interesa saber a un momento determinado, lo que la empresa debe y lo que le deben.
El método se caracterizaba por una sola serie de cuentas: las cuentas personales que representaban los derechos y obligaciones del propietario.
Los métodos de registración que mantienen constantemente la equivalencia numérica en todas las partidas registradas, realizando anotaciones contrapuestas por igual valor se les llaman balanceantes, condición que no cumplen los métodos de partida simple.
El método de la partida doble
La evolución de las técnicas contables hizo necesario que los importes anotados fueran
balanceantes entre si y que los saldos (netos de importes sumados y restados) de las cuentas
también
se
balancearan.
Además, como
toda
la
estructura
de las cuentas utilizadas se deriva de la ecuación
fundamental, toda
modificación patrimonial debe
reflejarse en anotaciones de por lo menos dos cuentas (una o más al debe y una o más al
haber) ya que lo contrario significaría no cumplir con la igualdad básica.
Lo dicho anteriormente es lo que explica por qué el método de registro utilizado se llama de PARTIDA DOBLE: por cada operación hay que efectuar por lo menos dos anotaciones.
Se formularon ciertas normas para mantener un orden en la registración por partida doble.
El
método de Registración por Partida Doble aplicado a un sistema o conjunto de cuentas establece que
la suma de importes registrados
en
el
Debe (débitos) debe
ser constantemente igual a la
suma de los anotados en el Haber (créditos) de las cuentas correspondientes.
En 1494, Fray Luca Pacciolo, de la orden de los franciscanos, da a conocer un método veneciano de teneduría de Libros, a partir de fines del siglo XV tratados de contabilidad impresos dieron a conocer el método veneciano el que se conocería como método de partida doble denominación que conserva aún hoy.
Principios y reglas de registración
Para establecer que tipo de cuentas debe utilizarse con el fin de reflejar con fidelidad la evolución patrimonial de un ente, debe recordarse el concepto que brinda la ecuación contable básica.
A – P = PN, entonces A = P + PN
ACTIVO = PASIVO + PATRIMONIO NETO
A = P + PN
Dentro del patrimonio neto
tenemos al Capital que es el aporte del propietario y la reinversión de
utilidades resumido en el concepto de Ganancias menos Pérdidas
PN = Capital + Ganancias – Pérdidas
Sustituyendo
esa igualdad en la fórmula original:
ACTIVO = PASIVO + (CAPITAL + GANANCIAS – PÉRDIDAS)
Trasponiendo
el término negativo al otro lado de la igualdad hace que la fórmula quede
expresada de la siguiente manera:
ACTIVO – PÉRDIDAS = PASIVO +
CAPITAL + GANANCIAS
Recordemos que
tal
igualdad permite, en
cualquier momento
reflejar la
situación
patrimonial de la empresa y también interpretar
los
efectos de cualquier operación o hecho con efecto patrimonial.
Esto significa que el patrimonio
neto:
a)
aumenta o disminuye en la medida que se incrementan las ganancias o capital
b)
disminuyen si
aumentan las pérdidas
Las anotaciones en cuentas de activo,
pasivo y patrimonio denotan conceptos amplios y no podrán ser de gran uso en la toma de decisiones porque la información que brindan es muy genérica,
por
eso
es
necesario
utilizar cuentas
referidas a conceptos
más específicos.
Reglas de registración:
Son de carácter convencional y se derivan de lo que se conoce como Partida Doble. Debemos recordar que:
ACTIVO – PÉRDIDAS = PASIVO + CAPITAL + GANANCIAS
Las cuentas de activo y pérdidas tienen naturalmente saldo deudor y se registran: en el
debe, o sea, a la izquierda, el saldo Inicial y los aumentos y a la derecha, en
el haber, las disminuciones
En las cuentas de pasivo, ganancias y capital tienen naturalmente saldo acreedor y se registran: a la
derecha, en el haber, el saldo inicial y los aumentos y a la izquierda, en el
debe, las disminuciones.
Basados en los convencionalismos de la registración, derivados de los conceptos de “partida doble” y de “ecuación
fundamental del patrimonio” formulamos las REGLAS para ordenar los aumentos o
disminuciones de cuentas integrales
–cuentas de activo y pasivo- y en cuentas
diferenciales –cuentas de
capital, la cuenta resultados
acumulados, las cuentas de ganancia y pérdida.
REGLAS DE LA PARTIDA DOBLE
Si analizamos detalladamente estas reglas de registración, las podemos simplificar de esta manera:
1.
Las cuentas con saldo deudor son las de Activo y las de Pérdidas
2. Las cuentas con saldo acreedor son las de Pasivo, la de Capital, la de Resultados
Acumulados (que
son las pérdidas y ganancias de ejercicios anteriores) y las de Ganancias
3. Las cuentas con saldo deudor se debitan cuando aumentan y se acreditan cuando disminuyen
4. Las
cuentas con saldo
acreedor
se
acreditan
cuando
aumentan y
se debitan cuando disminuyen.
Saldo
normal
de
las
cuentas
es el tipo de saldo que
para
cada cuenta fue definido convencionalmente.
excelente tu material, simple y claro. muchas gracias
ResponderEliminar